ERES BIENVENIDA
Te guío paso a paso a conectar con
sensaciones vulvovaginales agradables para superar las
limitaciones en tus relaciones íntimas.
Donde ANTES había tensión,
AHORA te encontrarás con sensaciones agradables.
Puede que te hayas encontrado en las siguientes situaciones:
-Te resulta difícil ponerte un tampón o tocarte con los dedos la vulva.
-Tus amigas tienen pareja y tú te sientes diferente al resto.
-Te preguntas por qué te ocurren estas cosas justamente a ti.
-Sientes que hay algo malo en ti, o algo no funciona.
-No consigues practicar la penetración con un chico y sientes que falta algo.
-Dudas sobre si podrás ser madre ya que no has conseguido practicar el coito con tu pareja, y cuando piensas en ello, sientes miedo, frustración, o malestar.
-No compartes todas estas sensaciones y dificultades por vergüenza y las personas de tu alrededor jamás te imaginarían así. Tienen una imagen diferente de ti.
-No pides ayuda para solucionarlo, quizá has pensado que a nadie más le ocurre o que no tiene solución.
ES TU MOMENTO
Haces como que no pasa nada, pero en el fondo sabes que hay algo dentro de ti que va mal, pero no quieres pensar en ello. Te da miedo pensar en ello.
AVANZA
Quieres formar una familia pero te sientes incapaz porque no consigues practicar el coito con tu pareja y te gustaría quedarme embarazada de forma natural, como todo el mundo.
ENCUENTRA TU AUTENTICIDAD
Cuando un chico intenta tontear contigo, si la cosa va a más porque incluso, te gusta, cortas después de la primera cita, o antes, porque sabes que luego se espera que tengáis relaciones y no crees que vayas a poder, sientes que vas a pasar mucha vergüenza y que vas a tener que contarle que no lo has hecho antes.
ENTRENA PARA SER MÁS NATURAL
En las relaciones sexuales, anticipas que te vas a poner tensa y que vas a tener que evitar la penetración vaginal, y ya eso te quita las ganas, estas demasiado pendiente de todo para que no te duela.
Es un secreto malo que guardas y te duele porque las demás chicas y mujeres pueden tener un ligue de una noche, o pueden intentar tener hijos, y tú no ves cómo.
Te dices a ti misma que no te interesa tener relaciones, ni pareja. Que estás bien así. Que no merece la pena. Que la penetración no es importante. Que con tu deporte, amistades y trabajo, ya no tienes tiempo para más.
